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  • En El fistol del diablo Payno construye un argumento

    2019-05-29

    En El fistol del diablo Payno construye un argumento o trama que abriga una rencilla entre naciones que se remonta D609 la guerra de Texas, con memoria de El Alamo y la batalla de San Jacinto en la que el general Santa Anna es sorprendido y vencido por Sam Houston. La historia se repite, por lo tanto, en dos planos: el asedio de Tenochtitlan por Hernán Cortés, y su paralelo histórico en El Alamo con Santa Anna al mando. Por razones de lógica narrativa, Payno reemplaza El Alamo con la Batalla de San Jacinto, en la que Santa Anna es vencido. El asedio de la ciudad de México y, por relación metonímica, la Quinta de San Jacinto, serán, en forma implícita, repeticiones de lo acontecido en El Alamo, pero en forma inversa: ahora es el ejército norteamericano el que ataca la “fortaleza” mexicana. Una lectura atenta de esta sincronía histórica nos permite apreciar el rigor con que Payno organiza en dos partes o tomos la edición de 1887. En efecto, es en el primer capítulo del segundo tomo donde el lector tiene conocimiento de que tanto Manuel como Valentín acompañaron a Santa Anna a “la campaña de Tejas, hasta que aconteció la derrota de San Jacinto, de donde se retiraron a pie, habiendo llegado a las villas del norte” (2000b: 12). Luego se indica que fue durante un viaje por el norte que Manuel se enamoró de Teresa, ligándose en tal coyuntura la idea de campañas de guerra y de amor, en directa simetría con las de Arturo. Nuestro interés, por ahora, es el diseño irónico que se establece entre la derrota del ejército de Santa Anna en San Jacinto, y la etapa final de la guerra de 1847 en México, la cual culmina en El fistol del diablo precisamente en la Quinta de San Jacinto, donde se repite en forma simbólica lo acontecido en El Alamo. En el pasaje citado, son los voluntarios de Indiana y los rangers texanos los que representan la barbarie y el caos, conocidos por un racismo anti-mexicano que ha sido documentado en la historia: Payno, por lo visto, decidió asociar o sobreponer dos catástrofes mexicanas: la causada en México por los Estados Unidos —cuya entrada triunfal en la capital es dirigida por el diablo (“Rugiero venía al lado del capitán Americano”, en el capítulo “La fuga”)—, y la relacionada con el general Antonio López de Santa Anna —desde las causas bélicas en El Alamo y en San Jacinto, hasta el efecto histórico en la ocupación norteamericana de México—, lo que explica la representación francamente negativa de Santa Anna en esta novela de Payno. No tenemos noticias de que Santa Anna haya leído El fistol del diablo, sin embargo no se le ocultó la crítica del novelista: Luis González Obregón nos informa que en 1853 Payno es perseguido por Santa Anna, obligándolo a Synaptonemal complex refugiarse “en los Estados Unidos” donde reside hasta 1854, año en que Payno vuelve a México para tomar parte “en la revolución de Ayutla, tanto porque era contrario de Santa Anna cuanto por su amistad con Comonfort” (xiv-xv).
    III Concluyamos nuestro estudio con una reflexión sobre el estilo y la unidad estructural de El fistol del diablo. Recordemos que el capítulo inicial comienza con imágenes del paisaje mexicano (“Este cielo azul, estas fores”), seguidas de metáforas de guerra, libertinaje y pactos con el diablo. Imágenes y tropos de dicción similares —a veces idénticos— aparecen en las descripciones de la Hacienda de la Florida y de la Quinta de San Jacinto, repitiéndose en el último párrafo de la edición de 1887, justamente en la mañana posterior a la destrucción de la misma quinta en manos de los voluntarios de Indiana y Texas. La noche del ataque a la Quinta de San Jacinto —el 16 de septiembre de 1847, día y mes de importancia nacional en México— los rangers de Texas y voluntarios de Indiana ven frustrados sus varios intentos de entrar en “el fuerte”, hasta que dan “al fin con la ventana del costado, por cuya reja había subido Rugiero” (2000b: 652; énfasis nuestro). La unidad artística sugerida por estas referencias a costados, diamantes, cuevas, volcanes, pirámides, montañas, fieras, la avaricia, ejecuciones y el diablo, desarrollan un nexo ideológico de interés cuando nos damos cuenta de una de las intenciones de Payno al reescribir su larguísima novela: la de estructurarla según principios artísticos abiertos a la política e imaginación histórica del autor.